Año tras año miraba los grandes carteles del FIB, y moría de envidia al no poder ser un «fiber» (sobretodo en 2011 con Arcade Fire), así que este año siendo previsor, y con la promesa de que el 20 aniversario iba a ser espectacular, dos parejas nos animamos a comprarnos la entrada sin conocer ni un sólo grupo del cartel. Conforme iban anunciando grupos, nuestra ilusión decrecía, y las esperanzas de ver un buen festival se desvanecían en un mar de dudas. Y más teniendo en cuenta el cartel que presentaban otros festivales como el BBK. Pero ya teníamos casa, amigos involucrados, la entrada y por tanto poco más pudimos hacer que buscar los «looks» más festivaleros e intentar disfrutar de la fiesta. Además tocaba Tame Impala y sólo por ellos vale la pena pagar una entrada.
Para empezar martes y miércoles programaron unos cuantos conciertos gratuitos en el pueblo. Una iniciativa muy plausible, que disfrutamos. Nota: el Primavera Sound hace lo mismo, e involucra a los mismos grupos que van al Festival durante el día. Una idea que el FIB debiera imitar para mejorar el cartel de estos conciertos fuera del recinto oficial ya que a las 6 de la tarde difícilmente va ir nadie a ver a Skizophonic o Blank Realm, me quedé con ganas.
Y llegado el jueves accedimos al recinto del FIB. Para empezar atacaremos con las cosas positivas:
-Se nota que son ya muchos años, está todo a mano, y hay suficientes puestos de comida, bebida, baños (tal vez falte alguno más en la zona del concierto principal especialmente para las damas) y demás servicios. Lo que más me sorprendió fue la cobertura, el Festival ofrecía WIFI a 5 € (desconozco si funcionó bien), pero no hizo falta comprarlo porque la cobertura 3G era mucho mejor de lo imaginable en este tipo de eventos masivos. Parece algo menor, pero poder comunicarte durante los conciertos puede llegar a ser muy útil, y en ese sentido el FIB gana al SOS, BBK, Primavera Sound y demás festivales veraniegos.
-Otro puntazo a favor del FIB es el agua que reparten en los conciertos, siempre puedes ir a las primera fila a pedir un vaso de agua gratuito, y ciertamente en muchos conciertos se necesita.
-El enorme parking en la puerta es sin duda un gran acierto, puedes dejar en el coche bebida, comida o hasta unas sillas de la playa, y salir de vez en cuando a tomar un refrigerio, además los 3€ que cuesta son para Save The Children.
-Pocas colas, ni en la comida, ni en la bebida, ni en la entrada, ni en los baños, ni en la salida… las colas son prácticamente inexistentes en el recinto. Algo que no pasa en los accesos (buses y taxis).
-El sonido. Ha sido casi perfecto durante todo el Festival, muy gratamente sorprendido del magnífico sonido de todos los escenarios.
-La puntualidad, ningún concierto se demoró más de 4 minutos en su inicio (me fijé en todos), y la mayoría demostraron una puntualidad casi enfermiza, funcionó todo como un reloj.
-La zona Hawkers, una fiesta continua con DJ’s que ponían temazo tras temazo.
Cosas a mejorar:
-Autobuses que dan la vuelta al mundo para llegar el FIB, colas en los taxis, y pateo enorme hasta llegar a la pasarela. Se puede mejorar habilitando una salida o entrada en la parte posterior, poniendo autobuses directos desde la playa que no hagan un tour turístico por Benicàssim y avisando a los taxis que se puede hacer el agosto de 2 a 6 de la mañana.
-Los precios de la bebida. Desconozco si alguien se tomó un cubata a 9€, pero las cervecitas a 3 y el litro a 9 si que se vendieron, más por el calor que por otra cosa. Si bajas un poco el precio de la bebida seguro que evitas parte del macrobotellón de la entrada.
-Zona para niños. A mi me da igual (de momento), pero no cuesta nada montar una zona para niños que pueda contribuir a que los padres disfruten del festival.
-La atracción de feria bien, pero que le quiten la música que interfiere con la del escenario pequeño.
Y ahora ya el festival en sí.
Jueves
Día de inicio del FIB y día de toma de contacto. Pude disfrutar con James, que a pesar del calor demostró que son una banda eterna. Los Klaxons me decepcionaron en Bilbao el año pasado, y no esperaba mucho de ellos, por eso tal vez me sorprendió que demostraran unas ganas inusitadas por agradar y de hacer un gran concierto. Me gustó. Luego fuimos a la zona DJ’s donde se vivió un gran festival. Añadir que lo poco que vi de Tinie Tempah y de Aurora me gustó.
Se nos quedó esta canción en la cabeza, vivimos algo así pero con sol:
Viernes
Día grande para muchos. Empezamos con Manel en el que creo ha sido su concierto más minoritario en los últimos años, era pronto y me pareció que había más ingleses que catalanes con entrada este año (ironía), pero aún así poder llegar sin dificultad a primera fila de un concierto de Manel sorprende. Tocaron sus temazos en «modo festival» (animando a la peña a saltar e incluso sonriendo) y no defraudaron. Albert Hammond Jr fue otro descubrimiento, el de los Strokes tiene un directo casi mejor que el del resto de la banda, y si a sus dos o tres grandes canciones, le añade un par de los Strokes y muchas ganas, le quedó un concierto rocker inolvidable. Y luego llegaron Of Montreal y con ellos el diluvio, cayó mucha agua durante 20 minutos, y ellos siguieron tocando descamisados y desatados. Sin duda un grupo que suena de maravilla y que además en directo te contagian de una alegría desbordante. La lluvia vino casi bien, fue más un momento eufórico que un problema, sólo duró 20 minutillos, lo cual contribuyó a que no se hiciera pesada.
Tal vez por eso, cuando llegamos mojados a Tame Impala (el mejor grupo del cartel) nos quedamos un poco fríos. Son un grupazo, que hace unos conciertos perfectos, pero en Benicàssim acudieron a cumplir el expediente un poco cansados de tocar siempre lo mismo. No puede no gustarte un concierto de Tame Impala, pero si que puede dejarte con un sabor agridulce como fue el caso. Kasabian por su parte sacaron su repertorio lleno de temas simples y pegadizos para deleite de miles los ingleses que llenaron el escenario Maravillas.
Del viernes me quedo con esta canción donde el alumno aventajado de Lennon, Kevin Parker, demuestra su calidad vocal:
Sábado
El día de las sorpresas. Y la primera sorpresa llegó con los Nastys, grupo gamberro garajero de Madrid que hizo que la noche arrancara de maravilla. Triángulo en cambio sonaba poco limpio y parecía sufrir con el calor más que disfrutar del festival. François & The Atlas Mountains fue otro descubrimiento positivo, los franceses pidieron tocar más en España, y a mi no me importaría ir a verlos de nuevo. De hecho en medio del concierto consiguió que me olvidara de que Manic Street Preachers estaba tocando en un escenario abarrotado, fui a ver el final, y sólo su himno «If You Tolerate This» consiguió salvar un concierto ñoño…
Aún así el plato fuerte del día era ver a Lily Allen primero, y Pete Doherty con The Libertines después. Teniendo en cuenta que Lily había cancelado dos veces en el FIB, y que Pete se suele caer en mitad de los conciertos, la noche prometía a desastre… Pero Lily llegó a pesar de perder el avión, e hizo el para mi mejor concierto del Fib 2014. No soy muy fan de la niña mala del pop inglés, pero hay que reconocer que la tía tiene una voz prodigiosa y monta un espectáculo de un gran nivel. Disfruté mucho yo, y todos los presentes, por eso tras escuchar a Cat Power cantar dos canciones decidí que no quería embajonarme antes de The Libertines. El ex de Kate Moss, disfrazado de Coke Malla, hizo un buen concierto, sin excesos, sin concesiones, sin errores, sin sonar fino, pero sin dejar de repasar sus dos discos de cabo a rabo para deleite de los incondicionales.
La canción del día fue esta, Fuck You de una Lily Allen cada día más flaca:
Aquí un vídeo desde el FIB https://www.youtube.com/watch?v=k-QyilMk6wo
Domingo
El día del bajón. Es normal que las fuerzas estén justitas el domingo después de tanta marcha, y es casi normal que haya más gente sentada que de pie en los conciertos… lo que no es tan normal es que la mayoría de grupos programados para ese dían sean de un perfil «bajonero». Por eso nos dedicamos a buscar alternativas alegres a un último día de cansancio máximo. Y allí tocaron The Presidents of The United States sus temas de power-rock que tanto me hicieron saltar en los 90. Divertidísimo concierto. (En la foto está saltando)
Nina Nesbitt canta bien (un poco agudo), pero si no eres una veinteañera de Glasgow no es tu concierto, Travis son delicados y suenan genial, pero me pasa lo mismo, o eres muy fan o te conformas con el «Sing». En cambio La Femme con su psyche-punk son pura fiesta, nos lo pasamos genial bailando canciones como su «Antitaxi» que cerraba un directo que necesita ser pulido para dar el salto a grandes escenarios. Y eso a pesar del increíble magnetismo de su cantante femenina, Clémence Quélennec , esa chica va para estrella. Chlóe Howl le pone muchas más ganas que el resto de cantautoras noñas que pasearon por el FIB, además canta igual o mejor, eso sí, la viste el enemigo. Y la gran sorpresa de la noche la trajo M.I.A. Mira que me gusta poco el pseudo Hip hop discotequero, pero el espectáculo que monta la inglesa es digno de mención. Duró 10 minutos menos de lo previsto, pero aún así fueron 50 minutos de non-stop.
Tras eso el fin de fiesta con unos The Charlatans un poco pasados ya, y un Paolo Nutini que es el Pablo Alborán inglés, guapo y seductor, con letras facilonas que enamoran a las mujeres.
Canción del domingo empate para dos:
Hay que poner a La Femme que tocaron la canción del Festival… ahora bien, nosotros estábamos mucho más anchos que los del vídeo:
Y he de añadir esta canción que para mi significa tanto, y que además tocaron con mucha más energía de la que se puede observar en este video.
Resumen
Sorprenden las ganas que tienen por agradar todos (o la mayoría) de los grupos y lo bien que suenan. Sorprende el buen rollo generalizado que hay entre la gente, la mayoría son ingleses, muchos van hasta las cejas de todo, pero van a lo suyo y no se meten con nadie. Van a pasarlo bien, se disfrazan, se emborrachan, y bailan como locos… pero no juzgan, no se molestan si hablas en un concierto, no quieren líos, quieren fiesta. Por eso es un festival perfecto para las mujeres (y que nadie se ofenda), estaba lleno de veinteañeras inglesas dispuestas a pasarlo bien y hacerse selfies con las amigas. Por eso tantos grupos enfocados a atraer el público femenino en el cartel, y es que las Lily Allen, M.I.A, Cat Power, Chlöe Howl, Nina Nesbitt, Paolo Nuttini, Kati B o Ellie Goulding llenaban el cartel. En cambio grupos de rock duro (en esos festivales mujeres hay pocas) o de empujarse mucho, hay más bien pocos. (Acabé hablando de Silva y de Mata con los británicos de la foto de Las Provincias en el camino a casa*)
No digo que haya música para mujeres y música para hombres, pero si que el porcentaje de 20% de hombres no se supera en los conciertos de Pablo Alborán o Alejandro Sanz, y el 20% de mujeres no se supera en los de Iron Maiden. Por tanto eso supone que hay mucha mujer joven y soltera en el FIB, un porcentaje muy superior al de los demás festivales patrios. (Las guapas protagonistas de la foto son españolas)
Tras haber visitado varios festivales me doy cuenta de que depende de tu objetivo final tu festival es uno u otro, la intención inicial es la que te ha de llevar a decantarte por uno u otro. Si lo que quieres es escuchar buena música, vete al Primavera Sound, un festival musicalmente perfecto, pero dónde vas más a disfrutar de la música que de la fiesta (escasa). Si a ti te va más conocer gente, beber en la puerta y además con dos días de festival tienes bastante, vete al SOS de Murcia, allí hay de todo, pero de la música el público asistente pasa bastante. Si quieres un compendio de ambos, con buena música y buena fiesta, pero además un buen sitio dónde acampar y no te importa hacer colas, entonces el BBK es el tuyo. Si sólo quieres alcohol, vete a Cullera el próximo fin de semana al Iboga Summer, la bebida más barata que en los bares (cubatas a 3 euros), o al Arenal (Orinal) Sound, dónde siempre hay más gente fuera que dentro del recinto. Si quieres música española, sudor y rock, el Viña es tu momento. Pero si prefieres practicar inglés, playa, fiesta loca, y pasarlo bien, no lo dudes, vete con tus amigos al FIB y disfrázate (con una buena nevera portátil en el coche). Me falta ir al Low Cost, que creo que me gustará, para otro año no fallo.
PD. Cómo siempre lo mejor del festival es la compañía, así que elige bien tus compañeros de FIB. Los míos, insuperables.
Yo de festivales mira que no tengo ni idea, fíjate que yo pensaba que el BBK era solamente un banco y resulta que también es un festival. Pero oye, muy bien todo esto que me has contado del FIB porque es como si yo hubiese estado allí sin necesidad de ir y pagar.
Un besito! Felicidades por tu crónica, apañao.
Supongo que este te gustará más: http://vicentmarco.com/2014/03/13/los-10-mandamientos-de-las-relaciones/
Espero tu opinión!!!
Pingback: 10 cosas que mejorarían Valencia | Vicent Marco
Pingback: MBC Fest: motivos para acudir al Festival | Vicent Marco