Valencianos… la paella ha muerto. Ha sido sustituida por el «arroz con cosas». Ahora todo el mundo hace su paella con chorizo, guisantes y lo que le viene en gana. Vamos a tener que ir este domingo, día de todos los valencianos de entierro, al entierro de la paella. Es nuestro particular entierro de la sardina, por cierto, seguro que ya hay quien le pone sardinas a la paella. El entierro consistirá en enterrar un caldero (paella) con el que hayamos cocinado nuestras paellas más memorables acompañados de nuestros amigos. De fondo escucharemos «El Rock de la Paella» del Tío Fredo, y lanzaremos nuestras cucharas de madera sobre la tumba, como si fueran flores.

A partir de ahora vamos a tener que rendirnos a la evidencia, sucumbir a la globalización y acoger entre nosotros las nuevas versiones de paella que campan a sus anchas por el mundo. Señores la «paella valenciana» con su pollo, su conejo, su garrofó y su bajoqueta ya no existe, ahora imperan otras preparaciones mucho más actuales. Hemos perdido la batalla y el resultado son guisantes y chorizos. Si no me crees acompáñame a hacer un recorrido por las paellas que nos llegan de todo el mundo para conquistar nuestros estómagos.

Nuestra primera pista proviene de Francia. Nuestros vecinos, mucho más en la «avantgarde», unos revolucionarios y creadores mundiales de tendencias en moda, perfume, y gastronomía, nos traen esta paella.

Guisantes y chorizos a tutiplén, como mandan los cánones.

Luego me envían una foto desde Italia, el país que marca estilo y tendencia en diseño. «Paella alla valenciana» con pescado y verduras. Se ve que no han querido ponerle pollo y han preferido guisantes, pimientos, calabacines y tropezones varios. Además para que no quede duda de que es una receta que conquistará a los valencianos de «socarrel» nos han ilustrado el paquete con un torero y una flamenca dándole al «palmito».

Haz un tiramisú o una carbonara con nata y verás como se ponen los italianos.

Esto son comidas de supermercado, así que vamos a ver que dicen grandes chefs internacionales como Jamie Oliver, un referente en todo el mundo anglosajón. Pues Jamie ha demostrado en las redes con su paella de chorizo y pollo que otra paella es posible. En su receta que encontrábamos tropezones de pescado, guisantes, y un arroz bien removido, para probar definitivamente que nuestra idea de paella era totalmente equivocada.

Jamie está indignado, su portavoz ha declarado que una abuelita le recomendó ponerle chorizo (esto es real).

Pero esto es cosa de los «guiris» podemos estar tentados a pensar, así que subimos el nivel y visitamos a uno de los chefs más famosos de España, un referente televisivo como Pepe Rodríguez que juzga a algunos de los mejores cocineros de España en Masterchef. Pues Pepe ha tenido a bien cocinar esta paella «valenciana» que contiene nabo, zanahoria, chirivía, puerro, y pavo.

¡¡¡Que levante la mano quien no le haya puesto nabo y chirivía a una paella!!!

Será casualidad, y seguro que eso no pasa en los restaurantes… Pues resulta que muchos restaurantes tienen paellas precocinadas en sus cartas. Y claro llega a un punto en el que la evolución de la paella conoce su máximo esplendor. Esta empresa de Barcelona, Gastrofresc, cocina paellas de muchos tipos, algunas con nombres tan innovadores como «paella mejicana» o «paella del marqués», y las distribuyen por toda España. Se ve que el pimiento es un «must», se lo ponen a todas estas fabulosas y atrevidas neo-paellas.

Todos saben que en México inventaron la paella con frijoles y aguacate y nosotros desvirtuamos la receta.

Y luego ya nos podemos ir un poco más lejos, concretamente a Polonia, donde se les ha ocurrido mezclar churras con merinas y hacer algo muy original: la pizza de paella. En España tenemos una pizza hawaiana con piña, una barbacoa con salchichas, y pizzas con nachos y queso fundido al centro ¿por qué no pueden tener ellos una pizza de paella?

Además de vuelos directos, este es el mejor motivo posible e imaginable para visitar Polonia.

El tema de la pizza igual se les ha ido de las manos, demasiado hidrato. Porque todos sabemos que el arroz no se come con pan, si acaso un mendrugo para ayudarte con la cuchara, pero poco más. A nadie se le ocurriría meter paella entre pan, vamos, como tampoco se nos ocurre a nosotros meter patatas entre pan… o sí. El caso es que en Inglaterra están muy adelantados al resto de Europa.

Por supuesto lleva chorizo

Y así es como va evolucionando nuestra paella. Se va llenando de guisantes, chorizo, tropezones marinos, zanahorias y hasta masa de pizza. Paellas que seguro harán las delicias futuras de todos los valencianos y valencianas… I per valencians i valencianes em referisc als nostres gossos i als nostres gats, que són els únics que es poden tragar eixes «cagueraes». Perquè senyors i senyores ja m’estan tocant la corfa amb el «todo vale». A vore si comencem a cridar alt i clar que «arròs en coses no és paella», que ja està bé.

Aquí puedes firmar para pedirle a Jamie que rectifique su receta de paella y nos ayude a difundir la auténtica por el mundo.